“Honrar a los jubilados con hechos que les devuelvan la dignidad”

Como abogado y hombre que siempre levantó la voz por los más vulnerables, y no puedo dejar pasar el 20 de septiembre pasado sin rendir homenaje a nuestros jubilados. Esta fecha recuerda la sanción, en 1904, de la primera ley jubilatoria bajo la presidencia de Julio Argentino Roca, un hito de justicia social.

Los jubilados no son pasivos: son las raíces de un árbol que nos sostiene aún hoy. Con manos laboriosas construyeron caminos, escuelas, hogares y sueños.

Sus pasos marcaron la senda de la patria y su silencio es todavía enseñanza. Con dolor y nostalgia, debo decir que en estos tiempos los jubilados muchas veces son tratados como cifras o cargas.

Pero como escribió Antonio Machado: “Caminante, son tus huellas el camino y nada más”. Ellos dejaron huellas hondas en nuestra historia, y es nuestra obligación no olvidarlas.

Borges, en su ceguera luminosa, nos enseñó que la memoria es el verdadero tiempo. Los jubilados son la memoria viva: hombres y mujeres que nos entregaron el tiempo de su vida para que el futuro fuera posible. Hoy, más que nunca, necesitamos honrarlos. No con discursos vacíos, sino con hechos que devuelvan dignidad. Ellos nos enseñaron que trabajar era un deber y un honor, que la esperanza era posible incluso en la adversidad. Con la tinta de nuestros poetas, elevo este homenaje: “El jubilado es semilla y raíz, es la patria en su vejez, es la nostalgia hecha carne. Si los olvidamos, nos olvidamos de nosotros mismos.

Que ese Día del Jubilado sea un canto de gratitud y memoria, porque en ellos se refleja lo mejor de lo que fuimos y lo mejor de lo que aún podemos ser.

Jorge Bernabé Lobo Aragón / jorgeloboaragon@gmail.com

Voces, reclamos y esperas de jubilados

Algunos memoriosos, entre los que me incluyo, recordamos que cuando el presidente Milei pidió por medio del DNU y/o Ley Bases, facultades especiales para otorgar a los jubilados el 25% de aumento, desde enero 2024, los señores legisladores opositores decidieron negarle esa facultad. Obvio, eran y son aun, mayoría.

Tal actitud legislativa ha generado un severo perjuicio en los bolsillos de la clase pasiva. Y no sólo eso, sino que a partir de entonces comenzaron a escalar por decisión de esos personajes las férreas y caprichosas oposiciones que han minado voluntades con los contubernios, mensajes tergiversados, aprobación de leyes que no cumplen los requisitos que establece el artículo 38 de la ley de administración financiera. Incumplimientos que derivaron en los vetos del Presidente, habida cuenta que ante la inexistencia de Presupuesto, los legisladores que cuentan con 30 asesores (?) cada uno, debieron indicar con qué recursos se amortizarían esas erogaciones.

Marta Aloisi / aloisimarta@yahoo.com.ar

A diario vemos las desprotecciones que muchos sectores de la sociedad recibe como jubilados y discapacitados. Me tomé el trabajo personal y nadie alzó la voz con el boom de desarrollo inmobiliaria en Gran Buenos Aires y la baja en la calidad de servicios a raíz de los mismos. Vivo hace 82 años en la misma casa, jamas faltó el agua y, muy pocas veces, bajó la presión de la misma. Los últimos 3 años San Martín nos regala 2, 3 y hasta 4 edificios a estrenar por cuadra. El agua y la presión de la empresa siempre fueron suficientes pero, pasamos días que no llegaba ni a la planta baja. ¿No es abandono de las personas? Somos 5 ancianos en una cuadra. No hay más oficinas de AySA y nadie que atienda. Varias veces al día dejamos el reclamo técnico por redes y Whastapp. Sólo vimos gente rompiendo la vereda, pero era un servicio tercerizado. ¿La gestión anterior y el municipio no pudieron prever que la demanda exagerada y bombas trabajando día y noche nos afectaría a los vecinos de siempre? ¿Qué tipo de habilitación tienen para que esto suceda? Sabemos que los viejos somos números no productivo, pero somos la población más abandonada: falta de servicios que pagamos, jubilaciones magras, obras sociales, etc.

Ángela R. Rodríguez / srgarciar@gmail.com

Las estupideces que realizan los gobernantes o funcionarios a cargo de la administración las pagamos todos los argentinos. Los insultos de Milei, el “Ahorro” sobre la base de la destrucción de los ingresos familiares, de los jubilados. La destrucción de nuestra universidad, el abandono a los discapacitados, tienen un costo. La economía es una ciencia social, el objetivo es que la gente tenga una mejor calidad de vida. ¿Esta vez será distinto? Sí y siempre y cuando tenga el valor de reformar su gobierno con gente decente e idónea. Ya no hay más lugar para los Menem, Caputo, la “Hermanísima”, o los Spagnuolo. Si no hay valor para tomar las riendas y elaborar un proyecto de país industrial, científico y honesto tendremos siempre crisis cíclicas, que sólo beneficiarán a las ratas. Una verdadera coalición con el PRO, en proporciones iguales de poder y con gente honesta. Sin soberbia ni arrogancia, sin estupideces infantiles y verdadera gestión patriótica.

Hace 40 años que soportamos inútiles, es hora de verdaderos cambios. El drama no es especialmente económico, sino de confianza y cumplimiento con la gente. No queremos que regresen los “kukas”, pero no nos tomen de idiotas. ¿Podrá “el leoncito”, o seguirá con el show?

Esteban Tortarolo / etortarolo@gmail.com

Se conocieron los aportes del Estado a los partidos políticos para la campaña de las próximas elecciones legislativas nacionales. Recibirán $ 12.909 millones, $ 4.298 millones para senadores y $ 8.611 millones para diputados. Estoy a favor de esta ley que nos informa el dinero que recibe la política para cumplir con su deber en democracia.

Pero no me parece justo que semejante monto se otorgue en medio de tanta pobreza. Y además con un Presidente tan necio y limitado políticamente, que sólo atina a aplicar vetos. Tanto el Gobierno como la oposición deberían haber dejado de lado sus riñas inútiles y abrir sus ojos a la pobre realidad del país. Los partidos políticos hubieran contribuido poniendo a trabajar a sus miles de militantes para conseguir la financiación con aportes, donaciones, etc. y no refugiarse en el erario público. Pero hoy, ante el hecho consumado, exijo que la política, en estas semanas antes de las elecciones, valore de verdad la ayuda recibida. Que trabajen con enjundia para que sepamos sus planes y qué valores van a representar y defender en salud, educación, política económica, previsional y laboral, los problemas que interesan a todos. Mientras, en la calle los jubilados, educadores y profesionales de la salud piden justicia por el despojo a sus legítimos derechos.

Matías Aníbal Rossi / matiasrossi2014@gmail.com